Para abordar los impactos actuales y potenciales, de los efectos del cambio climático en los ecosistemas costeros, principalmente, el aumento del nivel del mar y la mayor frecuencia de eventos de temporal, se debe trabajar de manera proactiva y cooperativa para implementar estrategias de adaptación del espacio costero con diferentes niveles de exposición y vulnerabilidad. Se considera la adaptación como un proceso, en este marco la Intendencia de Maldonado se encuentra desarrollando una estrategia de adaptación costera, mediante Soluciones Basadas en la Naturaleza (SbN) que se ha iniciado con la puesta en marcha de dos programas:
Dichas acciones incluyen el retiro de estructuras e infraestructuras duras del espacio de playa, la construcción de cercas captoras de arena, la facilitación de revegetación natural de las dunas, la ordenación del ingreso a la costa mediante la instalación de camineros y pasarelas, acciones todas realizadas con el objetivo de consolidar un sistema de dunas.
Un sistema dunar extenso cumple satisfactoriamente los siguientes servicios ecosistémicos: actúan como un amortiguador natural que absorbe y desvía la energía de las olas y el viento, lo que ayuda a reducir la erosión de las playas y las zonas cercanas a la costa. En caso de tormentas o eventos meteorológicos extremos, las dunas pueden mitigar el impacto de las olas y reducir los impactos tanto sobre los ecosistemas naturales como los antrópicos. Las dunas están formadas por una mezcla de arena y vegetación que les permite absorber el agua, lo que ayuda a controlar la acumulación de agua en las áreas cercanas a la costa. Esta capacidad es fundamental, de dos formas, por un lado durante las mareas altas o tormentas, ya que las dunas pueden frenar la inundación de áreas terrestres. Por el otro, filtran las aguas que escurren desde el ámbito urbano hacia la playa disminuyendo los posibles contaminantes que pueda arrastar. Las dunas costeras no solo brindan protección, sino que también constituyen un ecosistema vital para una variedad de flora y fauna. Las especies vegetales que crecen en las dunas, como hierbas y arbustos, ayudan a estabilizarlas y previenen su desplazamiento, mientras que también ofrecen refugio a numerosas especies animales.
Las cercas captora de arena alteraran el flujo del viento de manera tal que los sedimentos que arrastra se depositen en el entorno de la cerca, minimizando los impactos de pérdida de arena del espacio costero por erosión eólica.
Los accesos a la costa ordenan el tránsito peatonal, minimizando el impacto de las sendas construidas en forma espontánea que cortan el sistema de dunas en múltiples sitios.
El retiro de estructuras e infraestructuras particulares liberando el espacio público
Demolición de boteras
Muelles
Casas
Retiro de la ruta N°10 hacia el continente y restauración del sistema dunar
Construcción de bicisenda
Repavimentación de ruta